“¡No comas grasas! Oye, tampoco es eso. Todos tenemos que comer grasas, pero de las buenas.” Esto lo podría haber dicho cualquier nutricionista y estaría en lo cierto. Acto seguido, habría recomendado el uso de oliva virgen extra en nuestra dieta, pero ¿no te has preguntado nunca qué significa “aceite virgen extra”?
Por fin estás en el sitio adecuado para averiguarlo, porque te lo vamos a explicar de manera muy sencilla. Bueno, eso y alguna sorpresa más que seguro te encantará saber. Aprendes a aprovecharlo mejor en cuanto a sabor y propiedades..
¿Te vienes?
¿Por qué comprar aceite de oliva virgen extra? ¿Qué lo distingue?
Bien, el aceite de oliva virgen extra se considera el mejor aceite del mundo. ¿Por qué? Por la artesanía de su elaboración. Estamos hablando de un aceite sin refinar, es decir, un aceite en el que se respetan al máximo las propiedades del jugo de la aceituna.
Pero concretemos aún más. Mira cómo es el proceso paso a paso:
1. Escogemos las aceitunas para obtener mejor aceite de oliva extra:
Deben estar en el proceso de maduración de entre 6 y 8 meses. La razón es muy simple: es cuando más aceite podemos extraer de ellas, con la mínima intervención.
Por supuesto, para este aceite de oliva seleccionamos las más sanas.
2. Lavamos la oliva y las molemos.
Cuanto menos tiempo pase desde que las recolectamos y las molemos, mejor. Así, la aceituna mantiene su frescura, no se fermenta ni se oxida y todas sus propiedades (de las que te hablamos un poco más abajo).
Por tanto, en cuanto las recolectamos, las molemos. Ojo, antes de hacerlo, es imprescindible lavarlas con agua decolorada y descalcificada y, como es lógico, deshacernos de las hojas, las ramas y las piedras que darían una acidez y una textura que no te gustaría encontrar, ¿verdad?
3. Molienda.
Digamos que, al moler la aceituna encontramos dos partes:
- Una pasta obtenida de la carne, el hueso, el agua y el aceite.
- Alpechín, que es un líquido de color alquitranado, con un olor desagradable y que, en ningún caso, puede mezclarse con la joya que consumes.
Primero se bate la pasta para extraer el aceite con facilidad y, después, se centrifuga. Es en ese momento, donde se separa el alpechín del agua de aceite.
Finalmente, molemos la pasta con sumo cuidado, ya que está en contacto con el aire y corremos el riesgo de oxidar la maravilla extraída.
4. Decantación por centrifugación o prensa del aceite de oliva.
Este es uno de los momentos más delicados, sin duda. Metemos el batido de la pasta en la presa o en la centrifugadora a menos de 27 grados. Ten en cuenta que las altas temperaturas también hacen estragos en el aceite y eso se aleja mucho de lo que quieres en tu mesa.
5. Filtrado del aceite virgen extra.
Pues bueno, por si se ha colado alguna impureza, a pesar de todos los pasos previos, terminamos con un filtrado que garantiza que no solo tengamos un el mejor aceite de oliva, sino que te ofrezcamos el mejor aceite de oliva virgen extra del mercado.
Teniendo en cuenta el mimo, la exquisitez y la pulcritud con las que abordamos el proceso, desde la siembra hasta su envasado, el precio del aceite de oliva parece más que irrisorio, ¿a que sí?
Pero si, además, tenemos en cuenta los beneficios del aceite de oliva el precio está más que justificado, ¿Cuánto vale tu salud? Medicina tradicional, elaborada con la sabiduría de una tradición milenaria a la que sumamos la tecnología y los datos que nos ha dado para potenciarlo.
5 propiedades del aceite de oliva virgen extra
1. Fortalece el sistema inmunitario.
Ahora que la naturaleza nos ha dado un revés con la Covid y otros virus; ahora que conocemos mejor que nunca la contaminación del aire que respiramos; ahora que la sequía y los incendios suponen un mazazo para nuestras defensas, debemos cuidarnos por dentro. Y hacerlo de la forma más natural posible, sin procesados ni compuestos químicos que dañen una parte de nuestro cuerpo para proteger otra.
La comunidad científica está de acuerdo en que el aceite de oliva virgen extra es nuestro mejor amigo para combatir las bacterias y virus que nos rodean. La razón es muy sencilla: aumenta el número de células que vigoriza nuestra resistencia ante enemigos externos.
2. Beneficios del aceite de oliva virgen extra: mejorar tu circulación.
¿Te acuerdas de lo que decíamos de las grasas buenas? Pues aquí las tenemos. Los ácidos grasos del aceite de oliva virgen extra facilitan la vasodilatación. Esto significa que la sangre fluye con mayor facilidad y, por tanto, la tensión arterial se autorregula.
Así, también se convierte en un poderoso ninja contra los efectos secundarios del estrés donde la presión arterial se ve bastante comprometida. Ese constante ir y venir con la sensación de que vas con el agua al cuello, de que es imposible llegar a todo lo que deseas nos pone muy nerviosos en más ocasiones de las saludables.
3. Controla la diabetes al comprar aceite de oliva
Adquieres medicina contra una de las enfermedades silenciosas y crónicas más corrosivas del mundo. Y además eso no es todo: también te ayuda a poner a raya a los triglicéridos.
4. El aceite de oliva virgen extra ayuda a bajar de peso.
Ja, ¿quién lo diría, eh? Con la mala prensa tuvo en décadas pasadas. Así que dirás ¿eso cómo va a ser? Bueno, ya te hemos dado algunas pistas, ayuda con la glucosa, los triglicéridos, la circulación… Todo ello es ideal para perder peso, aunque hay más.
Una propiedad que te va a encantar ¡Reduce el apetito! Eso sí, como siempre decimos, en crudo o para la plancha y una cucharadita. Los milagros en nutrición y salud no suceden nunca, vence la calidad y el sentido común.
5. Propiedades del aceite de oliva virgen extra: Te ayuda a conservar la memoria.
¿Te contamos un secreto? Esta es una de nuestras propiedades preferidas. Imagínate, con los dispositivos móviles chivándonos todo y con las constantes notificaciones sonando la memoria cada día se encoge más en nuestro cerebro. Así que tenemos que alimentar bien. Contra las distracciones, buenas dosis del mejor isotónico del mundo para el recuerdo: el aceite de oliva virgen extra o si eres un sibarita del aceite, prueba nuestros aceites de oliva gourmets, premiados en varias ocasiones.
¿Las responsables de que podamos hacer frente a las distracciones continuas? Las vitaminas E y K y los polifenoles. Estos últimos nos protegen de las toxinas que contaminan nuestro cerebro.
Mira, los beneficios del aceite de oliva son innumerables. Hay dos razones principales que justifican la mala fama de la prensa: la primera es que se usa mucho en frito; la segunda, que, incluso en crudo, se abusa de las cantidades. Verás, la fritura excesiva del aceite tiene un efecto secundario inmediato: su descomposición molecular, por lo que todos los beneficios que buscamos al comprar el aceite de oliva desaparecen.
En cuanto al exceso, nuestro estilo de vida genera una necesidad de grasas determinada. Gastamos la mitad o más de la energía que usábamos hace 50 años. Entonces, ¿por qué seguir comiendo igual? Se trata de ajustar nuestra manera de comer a nuestra forma de vida. Tan sencillo como eso.